Si tu bebé está enfermo probablemente tenga o tendrá mocos, porque suele ser un síntoma común en los resfríos. No obstante, no es fácil saber si tiene muchos mocos o no y cómo le afecta a tu bebé.
A continuación te doy algunas claves de mi «experiencia» 👇
Observar a tu bebé
El primer consejo que te doy, es que observes a tu bebé. Si notas que tiene estos síntomas:
- Pierde el apetito.
- Pierde el interés por los juegos o su entorno.
- Duerme mal o está irritable.
Estos son sintomas de que puede estar enfermo. Evidentemente observa también su nariz, si ves que está obstruida o no. Si la nariz está en taponada, tienes que limpiársela porque el lactante no sabe respirar por la boca.
Escuchar la respiración de tu peque
Si no ves nada en su nariz, escucha su respiración. El bebé con mocos respira como un cerdito, sobre todo cuando come, ya sea el biberón o la teta. Cuando duerme, al estar tumbado sobre una superficie plana, también escucharás que respira con dificultad.
Al final es normal, a todos nos pasa lo mismo cuando estamos enfermos, dormimos mal.
Tocar la espalda del bebé
Puedes poner la mano sobre su espalda para sentir los mocos. Si la mucosidad se ha acumulado en los bronquios, puedes sentir como “crujen” los pulmones. Esto es una indicación para observar a tu bebé, pero si tienes cualquier duda de una bronquitis o que se suman otros síntomas debes de contactar con tu pediatra.
Ahora que sabes que tu bebé tiene mocos, existen varias formas de limpiarle la nariz.
| Lo que hice yo: Mi bebe cogió un resfrió a los 3 meses, pues como todos me asusté. Observé todos los signos de una infección y cuando vi lo de su nariz fui al pediatra que me dio soluciones para ayudarle a respirar mejor. Subí el colchón de su cuna donde está su cabeza para que duerma mejor y que los mocos no le molesten tanto en su descanso. Como le costaba comer, empecé a limpiarle también la nariz con Aluneb hipertónico. Es una forma de jeringa que se llama “nebulizador” con la que se utiliza una solución salina de la misma marca. Se echa el producto como si fuera una ducha nasal por todos los lados. Luego utilicé un aspirador nasal, porque estaba su nariz entaponada, ya que la solución de aluneb puede causar molestias si se queda mucho rato en las vías nasales. La solución y el tratamiento es un poco invasivo así que lo aconsejo solo en el momento de la infección. Cuando el bebé iba a mejor, utilicé un suero fisiológico. Eso es el lavabo tradicional: poner su cabeza de un lado, echar el suero al bebé con una presión fuerte en la fosa nasal superior para que se fluían los mocos por el otro lado. Se repite la operación por la otra fosa nasal, cambiando la cabeza de lado. |
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